Hay un espacio, un hueco pidiendo a gritos ser rellenado. Es imposible negarse, la fuerza nace en uno con un ímpetu desenfrenado y entonces ya nada puede hacerse....
El comentario cínico, el chiste estúpido, el doble sentido nacido para mantenerse oculto, salen a la luz. "Era necesario", y sí el espacio, el hueco, alguien tenía que hacerlo.
Teoría 2
Sobre chiste 1 y 2
Si hay algo que me divierte es el absurdo. Cuando una situación absurda se condensa en un chiste, eso me hace morir de la risa. No todos los chistes son buenos, en toda mi vida sólo he escuchado muy pocos buenos. Por lo que llegué a comprender son aquellos que basan su comicidad en la inocencia del remate. Por eso los comparto, porque los habré escuchado unas cien veces pero en todas, absolutamente en todas me he reído.
Por ahí alguien se sabe uno así y ya tendré más para recordar...
Chiste 2
Dice que un hombre está trabajando en una construcción, taladrando, con una banana insertada en el oido izquierdo. En eso un hombre ve la situación y en un arranque de solidaridad le avisa a su compañero:
- Lopéz tenés una banana en la oreja.
- ¿Qué?
- Que tenés una banana en la oreja.
- ¿Ah?
- Que tenés una banana en la oreja.
- No te escucho, a ver ,pará hablame de este lado que en esta oreja tengo una banana.
Chistes 1
Dice que llega un hombre muy peludo al doctor, le muestra su pecho rebosante de pelos y asustado hasta la médula le pregunta al médico:
- Doctor, por Dios ¿Qué padezco?
Y el doctor responde:
- Padezzze un ozzzito